Consejos para conducir de noche
Cuando vamos a conducir de noche, pueden aparecer ciertos problemas como el sueño, la poca visibilidad o los deslumbramientos de otros coches. Ya sea por motivos laborales, por cuestiones de un viaje muy largo o porque en invierno las horas de luz se acortan; movernos en la oscuridad puede ser incómodo para algunos.
Imagínate que estás de vacaciones y, tras alquilar un coche, quieres aprovechar al máximo cada día para disfrutar de los alrededores. Seguro que intentarás alargar las horas, salir muy pronto y volver muy tarde; así que hoy queremos darte algunos consejos si piensas coger la carretera cuando el sol ya se haya marchado.
10 consejos para conducir de noche
Una bonita puesta de sol es un momento único, que podrás recoger gracias a las múltiples apps que podemos descargar en nuestro teléfono. Pero luego toca volver a casa o a donde estemos alojados, y conducir de noche puede ser peligroso.
Comprueba los sistemas de iluminación
Antes de empezar un viaje o salir de noche, controla que todos los dispositivos de iluminación funcionan a la perfección. Si sueles conducir durante las horas de mayor oscuridad, te recomendamos que instales las tecnologías más avanzadas: faros LED o de xenón, inteligentes, un buen ordenador de a bordo…
Regula los espejos
Si tienes tus espejos interiores y exteriores en la posición adecuada, las luces exteriores te molestarán menos: evitarás deslumbramientos y estarás más cómodo en la carretera. Además, sé tú también respetuoso con los demás, al usar las luces y antinieblas.
Enciende las luces antes del anochecer
Si enciendes las luces de cruce una hora antes de la puesta de sol, tus ojos se irán acostumbrando poco a poco al cambio de luz y colores de la carretera. Esto te permitirá hacer una transición más agradable de la tarde a la noche.
Adapta tu velocidad
Por la noche la visibilidad es menor, por lo que reducir nuestra velocidad y aumentar la distancia de seguridad son dos medidas que te ayudarán a reaccionar mejor ante los posibles imprevistos. Las condiciones de la vía son las que marcarán tu comportamiento.
Descansa
Si sabemos que tenemos que conducir de noche, llega descansado a esas horas. Aun así, no te olvides de hacer paradas de descanso con mayor frecuencia, cada hora u hora y media, para estirar las piernas y relajarte un poco.
Aumenta tu atención
Precisamente por los posibles problemas de sueño, trata de intensificar tu concentración de forma activa. Mira más a menudo los espejos, habla con tu copiloto si puedes y mantén ventilado el interior del coche para que no haya ningún problema.
Para si es necesario
Después de todo esto, ante los primeros síntomas de somnolencia (lagrimeo, picor de ojos, fatiga ocular…), busca un lugar seguro para descansar y tómate tu tiempo antes de volver a la carretera.
Evita las distracciones
Pon música que te ayude a estar más atento a la carretera, y evita conducir con la luz del habitáculo encendida. Esta provoca un contraste muy alto entre la iluminación del interior del coche y el exterior, lo que empeorará tu visión.
Mantén limpio tus cristales y faros
Aunque esto te ayudará en cualquier momento del día, por la noche se perciben más los molestos reflejos en las lunas de tu vehículo. Preocúpate de que siempre estén en buen estado y con los faros a la altura adecuada, para tener la mejor visibilidad sin molestar a otros conductores.
Utiliza carreteras en buen estado
Por último, intenta transitar por carreteras con una buena iluminación y que estén en buen estado. Lo mejor son autopistas o autovías, ya que están preparadas para viajes largos y cuentan con varios carriles para evitar problemas con otros vehículos.
Esto son algunos consejos para conducir de noche, que te vendrán bien si no estás acostumbrado. A pesar de todo, si te sientes con miedo o inseguridad por coger el coche a estas horas, evítalo siempre que sea posible.