Alquiler de coches de larga duración, ¡todo son ventajas!
El alquiler de coches de larga duración es la solución perfecta en circunstancias muy diferentes. Puede serlo cuando se va a disfrutar de unas largas vacaciones, pero también lo es si se va a pasar un tiempo en otra ciudad o como alternativa en caso de una reparación que obligue a nuestro coche particular a pasar semanas en el taller.
Cada vez hay más clientes que se interesan por la posibilidad del alquiler de vehículos de larga duración por periodos que pueden ir desde unas semanas a varios meses, llegando en algunos casos incluso a un año. Y cada vez son también más las personas que solicitan este tipo de servicios por sus incontables ventajas.
Principales ventajas del alquiler de coches de larga duración
El alquiler de coches de larga duración está diseñado especialmente para aquellos clientes que necesitan disponer de un coche durante un periodo prolongado de tiempo, pero no suficiente para que resulte rentable adquirir un vehículo u optar por un contrato de renting. Esa sería su ventaja básica, pero hay muchas otras.
Por un lado, hay que tener en cuenta que el alquiler de coches de larga duración permite elegir entre una amplia gama de vehículos. Este servicio permite elegir el vehículo más adecuado y sustituirlo por otro si, pasado el periodo contratado, han surgido nuevas necesidades.
Otra gran ventaja tiene que ver con el aspecto económico. El alquiler de coches de larga duración resulta más económico que cuando se realiza por periodos cortos de tiempo que se van enganchando unos detrás de otros. La flexibilidad de los plazos de este modelo de contrato permite adaptar su duración a las necesidades de cada cliente.
A pesar de todo lo anterior, el procedimiento de contratación de coches de larga duración no difiere del de otro tipo de alquiler. Y esa es otra gran ventaja. Es un procedimiento muy rápido y sencillo que se puede realizar en cuestión de minutos, para disponer del vehículo de forma inmediata o reservarlo para el momento en el que se vaya a necesitar.
Una última gran ventaja es que con el alquiler de coches de larga duración es posible despreocuparse tanto del seguro como de las revisiones y las averías. Todos estos aspectos quedan incluidos en el contrato, y esto tiene una triple ventaja: el ahorro económico respecto a un coche propio, la comodidad de no tener que estar pendiente de estas cuestiones y el poder estar seguro de que el vehículo está en perfecto estado.
Por supuesto, una vez finalizado el contrato de alquiler de coches de larga duración caben varias posibilidades. Si es necesario, es posible ampliar el contrato con el mismo vehículo. Pero también cabe la opción de cambiarlo por otro modelo y continuar disfrutando de un coche de alquiler en las mejores condiciones.
En qué hay que fijarse antes de firmar el contrato
A pesar de todas estas ventajas del alquiler de coches de larga duración, es importante tener en cuenta algunos aspectos antes de firmar el contrato. Ese es, por ejemplo, el caso del kilometraje. Conviene conocer si el contrato admite kilometraje ilimitado o marca un tope durante el periodo en el que se disponga del vehículo.
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